Los mantenedores de espacio son dispositivos dentales diseñados para mantener el espacio que deja un diente de leche cuando se pierde antes de tiempo. Este espacio es crucial para que el diente permanente que está creciendo debajo tenga el lugar necesario para salir correctamente. Sin ellos, los dientes vecinos pueden desplazarse hacia el hueco vacío, ocupando el espacio que no les corresponde. Esto puede llevar a problemas como:
- Dientes permanentes desalineados.
- Mordidas incorrectas.
- Necesidad de tratamientos de ortodoncia más complejos en el futuro.
Es decir, los mantenedores de espacio son como una barrera protectora que evita que otros dientes se “muevan” donde no deberían.
¿Por qué puede ser un problema perder un diente de leche antes de tiempo?
Aunque los dientes de leche son temporales, tienen un papel muy importante en el desarrollo de la boca. No solo ayudan a los niños a masticar y hablar correctamente, sino que también “guardan” el lugar para los dientes permanentes que vendrán más adelante.
Cuando uno de estos dientes se pierde antes de lo previsto (ya sea por caries, traumatismos o extracción), el equilibrio de la boca se altera. Los dientes vecinos tienden a moverse hacia el espacio vacío, lo que puede dificultar o incluso impedir la correcta erupción del diente definitivo.
Aquí es donde entran en juego los mantenedores de espacio. Su función es asegurarse de que ese hueco quede intacto hasta que el diente permanente esté listo para salir.
¿Cuáles son los tipos de mantenedores de espacio?
Dependiendo de cada caso, el dentista puede recomendar un tipo de mantenedor de espacio específico. Los principales son:
1. Mantenedores de espacio fijos
Estos dispositivos se colocan en la boca y no se pueden quitar hasta que el dentista lo indique. Los más comunes incluyen:
- Banda y bucle: Consiste en una pequeña banda metálica que se fija alrededor de un diente vecino, unida a un alambre que mantiene el espacio vacío.
- Coronas distales: Se utilizan cuando se pierde una muela de leche y es necesario proteger el espacio hasta la salida de un molar permanente.
2. Mantenedores de espacio removibles
Son similares a los retenedores que se usan en ortodoncia. Estos aparatos pueden quitarse para comer o cepillarse los dientes, y suelen ser recomendados para niños más mayores que pueden cuidarlos adecuadamente.
Ambos tipos cumplen la misma función: preservar el espacio necesario para la erupción de los dientes definitivos. La elección dependerá de factores como la edad del niño, el número de dientes afectados y la ubicación del hueco.
¿Cómo se colocan los mantenedores de espacio?
La colocación de un mantenedor de espacio es un procedimiento sencillo y completamente indoloro. A continuación, te explicamos los pasos principales:
- Evaluación inicial: El dentista revisará el estado de la boca del niño y realizará radiografías para analizar cómo están desarrollándose los dientes permanentes.
- Toma de medidas: Si el dispositivo será fijo, se ajustará directamente en la consulta. Si es removible, se tomará un molde de la boca para diseñarlo a medida.
- Colocación: Una vez listo, el dentista colocará el mantenedor y explicará cómo cuidarlo para garantizar su efectividad.
¿Cuánto tiempo se debe usar un mantenedor de espacio?
La duración del tratamiento dependerá de cuánto tiempo falte para que salga el diente permanente. En algunos casos puede ser cuestión de meses, mientras que en otros puede extenderse a un par de años.
Es fundamental que los padres sigan las indicaciones del dentista y acudan a las revisiones periódicas para asegurarse de que todo marcha según lo previsto.
¿Qué ocurre si no se usa un mantenedor de espacio cuando es necesario?
Si no se coloca un mantenedor de espacio tras la pérdida prematura de un diente de leche, las consecuencias pueden ser significativas:
- Alineación incorrecta de los dientes permanentes: Los dientes definitivos pueden salir torcidos o fuera de su posición natural.
- Problemas de mordida: La falta de espacio puede causar mordidas cruzadas, abiertas o profundas.
- Mayor necesidad de ortodoncia: Los problemas dentales derivados de no usar mantenedores de espacio suelen requerir tratamientos más largos y costosos en el futuro.
Prevenir siempre será más fácil (y económico) que corregir.
Cuidados básicos para los niños con mantenedores de espacio
Para garantizar que el dispositivo cumpla su función, es importante seguir estas recomendaciones:
- Higiene bucal: Asegúrate de que tu hijo cepille sus dientes después de cada comida, poniendo especial atención en la zona del mantenedor.
- Evitar alimentos duros o pegajosos: Chicles, caramelos y alimentos duros pueden dañar el dispositivo o aflojarlo.
- Revisiones regulares: Lleva a tu hijo a la clínica dental para que el dentista revise el estado del mantenedor y la evolución de los dientes.
¿Cuándo acudir a un dentista infantil?
Si tu hijo ha perdido un diente de leche antes de tiempo, no dudes en consultar a un dentista infantil lo antes posible. Un diagnóstico temprano puede evitar complicaciones y asegurar el desarrollo adecuado de su dentadura.
En DentSalut, nuestra prioridad es cuidar de las sonrisas de los más pequeños. Contamos con un equipo especializado en odontología infantil que te acompañará en cada paso del proceso.
Los mantenedores de espacio son una solución sencilla, eficaz y completamente personalizada para garantizar que los dientes permanentes de tu hijo tengan el lugar necesario para crecer sanos y alineados. Si tienes alguna duda o necesitas orientación, estamos aquí para ayudarte. ¡Pide tu cita en nuestra clínica en Barcelona y protege la sonrisa de tu pequeño desde hoy!